3 trucos curiosos para enfriar tus bebidas más rápido

Uno de los mejores remedios para acaba con la sed es una bebida bien fría. Una cerveza, un refresco o agua, cualquier cosa sirve. La clave está en la temperatura, y si no tenemos una nevera disponible cerca, o tiempo, siempre podremos recurrir a técnicas ingeniosas para conseguir bebidas frías. Tres de estas técnicas las explicamos a continuación.

La forma habitual de enfriar la bebida es ponerla en algún lugar con hielo. Pues bien, esta técnica consiste en tirar de ingenio para acelerar este proceso. Solo tenemos que añadir agua y sal, para que la temperatura baje y los hielos se deshagan más rápidamente transmitiendo su frío. En unos 15 minutos tendremos nuestras bebidas fresquitas y disponibles para beber.

Otra forma de acelerar el enfriamiento es envolver nuestras bebidas en papel de cocina o servilletas mojadas y luego meterlas en el congelador. Algo que puede parecer tan sencillo, conseguirá enfriar nuestras bebidas en menos de 10 minutos, tiempo suficiente para que podamos preparar los aperitivos que acompañen dichas bebidas.

Otro método en el que hay que tirar de ingenio es aprovechar los sprays, generalmente los que llevan aire comprimido que se utilizan para limpiar múltiples aparatos. Y es que estos sprays llevan gas propelente a presión en combinación con el líquido limpiador que lleven. Y si ponemos el spray boca abajo, lo que sale es dicho gas propelente que se encuentra a temperaturas cercanas a 0º, por lo que si se lo aplicamos a la botella, esta se enfriará al mismo tiempo que se genera una capa de escarcha alrededor de ella.


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